Un hombre que está sufriendo una crisis de mediana edad encuentra un nuevo significado en su vida como parte de un equipo de natación sincronizada aficionado, de hombres, de mediana edad.
Borat, el exuberante, ingenuo y atrasado periodista kazajo fanático de los Estados Unidos, se propone realizar un documental sobre ese país. Borat se pone en marcha en busca de figuras políticas estadounidenses para elaborar con ellas una evaluación de la presidencia de Trump y su gestión de la crisis del coronavirus en el país. Borat, película film secuelaCritica: En el humor es muy difícil no ofender a nadie. De hecho, lo doblemente difícil es no usar tópicos candentes para obtener risas, diría cualquier buen humorista. Incluso yendo más allá se puede decir que el humor no lidia con lo peor de nuestras vidas sólo porque puede hacer reír, sino porque son estas mismas risas las que ponen en reflejo nuestros problemas y nos alivian un poco el alma quitándole seriedad a los mismos.Con este terrible 2020 que llega a su fin, es genial que Sacha Baron Cohen regrese por todo lo alto con una película que sea pasa por el forro cualquier filtro y ataca a toda alma que pisa esta tierra. Como la original, y mediante su hilarante personaje Borat, contrasta los sistemas de valores más rancios que pululan en Estados Unidos en la actualidad. El humor negro, ofensivo y absurdo sigue ahí, y produce risas con creces, pero nada de eso es lo que realmente diferencia esta secuela de la original. Aquí la historia se centra en la relación que se establece entre Borat y su hija, y el arco que ella vive pasando de ser una oprimida e ignorante chica a una mujer que empieza a obtener su independencia es más interesante que la historia de la original. El personaje de la hija es tan divertido como su padre, y a pesar de lo obtusamente machista que se presenta su relación (con intención, claro está) logran ser muy entrañables...Ahora, volviendo a Estados Unidos, sigo alucinando con cómo se lo monta Sacha para convencer a tantos hogareños para mofarse en su cara, grabarlos y que salgan en su película. Por supuesto que hay actores incluidos, pero también hay rostros famosos e incluso rostros pixelados en el filme. No es novedad que Sacha tiene unos huevos del tamaño de una catedral y carece de vergüenza alguna. Lo que me sorprende es que siga vivo al meterse con tal descaro con la derecha más reaccionaria y cateta de ese país. Alucinante. Todo sea por caldear aún más el ambiente de elecciones y, de paso, echarnos unas risas.Totalmente recomendada para los fans de Borat, los librepensadores o cualquiera que quiera darle una oportunidad a reírse con la vida. Que nos hace falta.
Avery, una adolescente con tendencia al perfeccionismo, recluta a su amiga Larson para que la ayude a prepararse para su primera vez con su novio a larga distancia...Sex AppealCritica: llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia..... Sex Appeal
Tercera entrega del popular musical de Disney creado para televisión. Troy (Zac Efron) y Gabriella (Vanessa Hudgens), alumnos del último curso, se enfrentan a la perspectiva de la separación ya que ambos emprenderán caminos diferentes en la universidad. Con ayuda del resto de los Wildcats, realizan un elaborado musical de primavera que refleja sus experiencias, sus esperanzas y sus inquietudes ante el futuro…
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