Servidor | Idioma | Tamaño | Descargar |
---|---|---|---|
Utorrent | WEBRip | 2.16 GB | Descargar |
Precuela de los cómics de Batman, centrada en la adolescencia de Bruce Wayne. Definida por sus responsables como una especie de Smallville, desarrollará además la vida de Jim Gordon como policía, y la enlazará con el origen del mito de Batman y de otros villanos
Una muchacha sobrevive en un bosque tras haber sido asesinada tiempo atrás. Con un rostro deformado por el maltrato que sufrió, es consciente de que nunca podrá abandonar la zona en la que se encuentra, por lo que se alimenta de todo lo que se adentra en su "hogar". Un día, un asesino en serie que huye se tropieza con ella, convirtiéndose así en su última víctima. Sin embargo, la joven no cuenta con que, en el maletero de su vehículo, se esconde un chico que estaba a punto de sufrir las mismas penurias que ella.
Julio está muerto. Es una noticia terrible para OVNI Levante, la asociación de aficionados a la ufología que él dirigió. La muerte le golpea con especial fuerza a uno de sus miembros, José Manuel. Julio y él tenían un proyecto común de vital importancia. Ahora deberá continuar solo como único conocedor del secreto cósmico que puede alterar el porvenir humano. Mientras tanto, en España se busca a una niña que desapareció hace semanas.
Cuatro madres se juntan para cenar y pasarlo bien. Cuando la noche da un giro inesperado, estas cuatro mujeres descubrirán que tienen más cosas en común de lo que pensaban. FunCritica:Por una parte, soy un tardío fan de la cinta original. En 1983 me pareció un pestiño (era un adolescente abducido por ‘La guerra de las galaxias’); en 1992, en mi opinión, el montaje del director mejoraba (y mucho) la propuesta; pero no fue hasta hace algunos pocos años, ya en formato blue-ray, en que me sedujo y cautivó por completo y sin reservas. Por otra parte, soy un entusiasta admirador del director Denis Villeneuve, de quien sólo he visto aciertos de todo género y planteamiento, un virguero de las imágenes y del montaje, un artista incontestable y evidente, lo mejor que me he encontrado en una sala de cine en lo que va de siglo. Es decir, que iba con ganas y sana curiosidad al cine, esperando encontrar un propuesta inédita y – sea cual fuera el camino elegido – llena de aciertos… pero nada más lejos de la realidad.Pero vayamos por partes, porque hay muchos aciertos pero también otros tantos deméritos dignos de mención. Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. FunEs decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia. Fun
No volver a mostrar