Son precavidos, silenciosos, intrépidos, miden 6,5 cm y nunca los han visto. Pocho Clock, Obdulia y sus hijos Anita y Pizquita viven pacificamente "de prestado" en el subsuelo de una casa habitada por la familia Lender. Un día, la intrépida Anita decide lanzarse a la aventura, y es atrapada por el joven Pete Lender, pero ambos se hacen buenos amigos y éste le cuenta a Anita que su tía abuela Mary, a quien pertenece la casa, ha muerto y, al no aparecer su testamento, tienen que abandonar su hogar. Juntos se unirán en la alucinante aventura de la búsqueda del testamento para detener los planes del rastrero abogado Ocius Potter, que desea derribar la casa.
Stan, un agente inmobiliario sin escrúpulos, aterrado ante el hecho de ir a la cárcel por culpa de un delito de estafa, tratará de aprender una misteriosa arte marcial gracias a un maestro que le instruirá para intimidar a los reclusos y ser así respetado dentro de la cárcel.
Un Papá Noel ruidoso y poco ortodoxo está luchando para salvar su negocio en decadencia. Mientras tanto, Billy, un niño precoz y descuidado de 12 años, contrata a un sicario para que mate a Santa después de recibir un trozo de carbón en su calcetín.....Matar a SantaCritica: Vale, la premisa de "Matar a Santa" es tan imposible como ridícula. Vale, que una película de acción apenas tenga una única escena de acción al final de la película creando un anticlimax decepcionante es un suicidio narrativo. Vale, Walton Goggins está estereotipado y Mel Gibson se dedica a hacer las muecas de siempre. Vale, la película tiene más fallos que aciertos.Pero es que resulta que me ha encantado. Y aún no sé por qué. "Matar a Santa" es una película menor que funciona tan solo porque se toma en serio todos y cada uno de los despropósitos que contiene. O por decirlo de otra forma: es honesta en su locura. Por poner un ejemplo: tardan más de media hora en construir el personaje de Mel Gibson y cuando nos han convencido de quien es realmente (una premisa imposible) entonces dinamitan todo cuanto han conseguido con esa fábrica llena de Elfos. ¿Puede una película llena de Elfos, renos, militares, asesinos, y un Papa Noel en quiebra ser coherente? Pues lo es. MUY coherente. Y quizás por eso me ha encantado, porque solo comenzar todo parecía que iba a ser un desastre y, aunque en cierta manera dista mucho de ser perfecta, tiene personalidad. Está rodada con mimo, se toma en serio a sí misma y lo que es más sorprendente: acaba siendo entretenida.A veces el cine es un misterio, como con esta película. Tampoco es que os la recomiende porque puede que os parezca una locura aburrida. Pero, maldita sea, tengo que volver a verla. Me ha encantado......Matar a Santa
Un fan obsesivo saca de su escondite al solitario y controvertido autor Bruce Cogburn, lo que obliga al novelista a enfrentarse a un pasado del que pensaba que podía escapar....The Infernal MachineCritica: Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.,... The Infernal Machine
Los Navy SEALS atacan a las fuerzas especiales colombianas con la intención de limpiar sus nombres y rescatar a un rehén... Tercera entrega de la saga "Tras la línea enemiga",
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