Arthur Fleck es un hombre ignorado por la sociedad, cuya motivación en la vida es hacer reír. Pero una serie de trágicos acontecimientos le llevarán a ver el mundo de otra forma. Película basada en Joker, el popular personaje de DC Comics y archivillano de Batman, pero que en este film toma un cariz más realista y oscuro. Joker CriticaTodd Phillips ha hecho una película que nadie esperaba de él, una obra cinematográfica de categoría, destinada a perdurar, oscura, turbia y perturbadora, realizada con cariño y respeto por el personaje, con conocimiento de causa, repleta de aspectos remarcables –desde la fotografía, con su inteligente uso de los colores, hasta la banda sonora-, y que toma como inspiración tanto los cómics de Batman, especialmente “La broma asesina”, de Alan Moore, como filmes de los setenta del tipo de “Taxi Driver”, “El rey de la comedia”, o “Alguien voló sobre el nido del cuco”. Precisamente el protagonista de algunas de estas cintas, Robert De Niro, aparece aquí de secundario en un papel relevante, estando presente en la que tal vez sea la mejor escena.Joker no es perfecta; sin entrar en spoilers, el guion abusa de ciertos recursos, y quizá esté Zazie Beetz un poco desaprovechada. Pero se las arregla para que todo lo que suceda en pantalla tenga su peso, y que la violencia, cuando estalle, impacte en el espectador.Porque detrás de la desquiciada sonrisa del Príncipe Payaso del Crimen late un corazón torturado, un alma melancólica, una figura trágica que abraza la locura como único camino hacia la felicidad. Porque la violencia es la única respuesta posible ante una sociedad que rechaza a los diferentes y les trata como basura. Si Jack Nicholson creó al Joker más divertido, y Heath Ledger reinterpretó al personaje convirtiéndolo en un terrorista sádico que sólo quería ver el mundo arder, Joaquin Phoenix aporta humanidad y patetismo a un individuo que sueña con alcanzar el éxito, que busca desesperadamente la aprobación de los demás. Hablamos de un pobre hombre que desea inundar de risas su alrededor. La composición del actor resulta tan magistral y extrema que por momentos uno juraría hallarse ante un auténtico enfermo mental recién salido del manicomio.Batman es el superhéroe aristocrático que desciende a las alcantarillas de la ciudad de Gotham para combatir el crimen; el Joker nació como el símbolo elegido por los oprimidos para rebelarse contra las injusticias; uno persigue la ley y el orden, el otro anhela la anarquía y el caos.Surge así una película extraña, donde el protagonista sucumbe a la oscuridad que le corroe, da rienda suelta a su yo oculto, se reencarna en el villano por excelencia, mientras la rabia se extiende por las calles como una enfermedad: los marginados, los humillados y ofendidos alzan la voz. Joker tiene la textura de una pesadilla, la tensión de una amenaza imparable, la intensidad de un cerebro desintegrándose y dando vida a un monstruo.Ahora bien: que haya críticos profesionales que valoren el filme, no por su calidad, sino por la reacción que pueda suscitar entre cierta clase de gente, me parece un despropósito. Yo que aún creía que el cine era un arte y no una herramienta educativa. Todo apunta a que dentro de nada no se cortarán en decidir por nosotros las películas que hay que ver, los libros que leer, y lo que debemos pensar sobre cualquier tema. La cosa resulta todavía más grave cuando estos ataques de moralidad y paternalismo provienen de sujetos pertenecientes a un país, los Estados Unidos, donde prácticamente cualquier perturbado tiene acceso a armas de fuego. Es para que se lo hagan mirar. Joker
Sidney Presscott, dos años después de los asesinatos de Woodsboro, California, vive feliz con sus amigos en el Campus de la Universidad de Windsor. El curso toca ya a su fin. Pero el día en que se estrena una película basada en la novela de la periodista Gale Weathers sobre los crímenes de Woodsboro, alguien es asesinado en el cine del campus.
El sheriff retirado George Blackledge (Costner) y su mujer Margaret (Lane) dejan su hogar natal en Montana para tratar de rescatar a su nieto en Dakota tras sufrir la pérdida de su hijo. El joven está bajo la supervisión de Blance Weboy, que tras descubrir las intenciones de su familia, decide hacer todo lo posible para impedir que le arrebaten su posesión más preciada....Uno de nosotrosCritica: claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.....Uno de nosotros
Mientras una mortal batalla explota sobre el brutal legado de Jigsaw, un grupo de supervivientes busca el apoyo del gurú de la autoayuda Bobby Dagen, un hombre que con sus oscuros secretos provocará una nueva ola de terror. Saw 3D El juego del miedo VII Critica:El subgénero bautizado como “torture porn” comete en mi opinión un fallo flagrante de base, que no es otro que mucha preocupación por desarrollar la más imaginativas maneras de desmenuzar al personal y ninguna preocupación por desarrollar mínimamente a los personajes (tampoco estoy pidiendo un Shakespeare) y crear una mínima empatía entre víctima y espectador, ante lo cual lo único que presenciamos es casquería sin emoción y lo que es peor: sin sentido alguno de la parodia o del humor negro, como tan bien hacían Peter Jackson y Sam Raimi en sus años mozos. El juego del miedo VIIPero bueno, como hay taquilla, la saga “Saw” vuelve a su cita anual con otra mamarrachada más para la colección, aunque esta vez, que ya era difícil, peor que nunca. Llevan rizando el rizo con la coña marinera la friolera de 6 secuelas, y eso que hace 4 películas que murió el malo; manda huevos, que diría aquel. El juego del miedo VIIY la culpa es mía, por iluso, por gilipollas, por ver cada vez esperanzado una nueva entrega sin esperar ninguna obra maestra, pero sí al menos un film de terror entretenido que me haga pasar un buen mal rato. No hay manera. En cuanto a éste género se refiere, suelo ser de lo más benevolente y me conformo con poco, os lo aseguro, pero mis tragaderas tienen un límite y tanta mediocridad junta en pantalla, lo rebasa. En cuanto a los actores… ¡Bua, ha, ha, ha! Perdón, me ha dado la risa floja. El juego del miedo VII
Después de verse obligada a mudarse a los Alpes alemanes con su padre y su nueva familia, Gretchen, una joven de 17 años, descubre que su nueva ciudad no es lo que parece, ya que está plagada de ruidos extraños y visiones aterradoras de una mujer que la persigue.
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