1918 Ucrania. Estudiantes patrióticos, protagonistas de la película, se preparan para defender a Kiev y luchar heroicamente en la Batalla de Kruty. En este contexto histórico, se revela la historia de la familia Savytskyi, el general de la contrainteligencia de Ucrania y sus dos hijos, Andrii y Oleksa Kruty 1918 KrutyCritica:Por una parte, soy un tardío fan de la cinta original. En 1983 me pareció un pestiño (era un adolescente abducido por ‘La guerra de las galaxias’); en 1992, en mi opinión, el montaje del director mejoraba (y mucho) la propuesta; pero no fue hasta hace algunos pocos años, ya en formato blue-ray, en que me sedujo y cautivó por completo y sin reservas. Por otra parte, soy un entusiasta admirador del director Denis Villeneuve, de quien sólo he visto aciertos de todo género y planteamiento, un virguero de las imágenes y del montaje, un artista incontestable y evidente, lo mejor que me he encontrado en una sala de cine en lo que va de siglo. Es decir, que iba con ganas y sana curiosidad al cine, esperando encontrar un propuesta inédita y – sea cual fuera el camino elegido – llena de aciertos… pero nada más lejos de la realidad.Pero vayamos por partes, porque hay muchos aciertos pero también otros tantos deméritos dignos de mención. Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. KrutyEs decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia. Kruty
Eleanor Arroway perdió la fe en Dios tras la muerte de sus padres en su niñez. Sin embargo, Ellie ha desarrollado una clase distinta de fe en lo desconocido: trabaja con un grupo de científicos escrutando ondas de radio procedentes del espacio exterior en busca de señales de inteligencias extraterrestres. Su trabajo se verá recompensado cuando detecte una señal desconocida que supuestamente porta las instrucciones de fabricación de una máquina para reunirse con los creadores del mensaje.....ContactoCritica: Acostumbrados a películas en las que la aparición de naves de otros mundos, efectos especiales, destrucciones de todo tipo, “Contact” es una excepción curiosa, adulta pero sobretodo temática y con cierto aire de autenticidad que no de pretensiones filosóficas ante un planteamiento tan conocido e interesante como es la posibilidad real de un contacto con seres de otro mundo. Partiendo ya del hecho de tratarse de una historia basada en un libro de Carl Sagan nos podemos hacer a la idea de lo que podemos encontrarnos. Primero un extraordinario reparto en el que los personajes hacen la historia y se ponen al servicio de la misma. “Contact” es desde mi punto de vista uno de los films más infravalorados de los 90, la que mejor y con más sencillez nos explica el cómo se podría producir esta situación desde una perspectiva más o menos real. Y lo cierto es que con un fondo dramático Robert Zemeckis consigue una de sus mejores películas en la que el acierto del reparto le ha funcionado a la perfección, no sólo Jodie Foster, sino (Tom Skerritt, John Hurt, William Fitchner, Angela Bassett, David Morse...) quizás el personaje más inestable es el interpretado por el limitado Matthew McConaguey es el menos interesante por intentar introducir argumentos religiosos donde no era estrictamente necesario y potenciar una innecesaria y casi absurda historia de amor.....Contacto
Una soldado estadounidense (Jennifer Lawrence) es herida en combate en Afganistán y sufre daño cerebral, tras lo cual vuelve a su casa de Nueva Orleans donde luchará por recuperarse....ResurgirCritica: ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia..... Resurgir
Detroit, 1995. La promesa de potencia industrial se ha transformado en un hervidero de conflictos económicos y raciales. La 8 Mile Road, que recorre el perímetro de la ciudad, marca ahora la frontera entre lo urbano y lo suburbano; entre lo blanco y lo negro. Allí, hay una larga tradición de creatividad negra. Ésta ha tenido siempre unas raíces obreras y ha expresado sin filtros su dura realidad. En los clubs, los mejores raperos se enfrentan en duelos verbales para conseguir el respeto de sus colegas. 8 MileCritica:8 Millas retrata una semana en la vida de un joven blanco de los suburbios de Detroit cuya mayor afición es el rap. La cinta, que está ambientada en 1995, tiene un claro contenido biográfico (Eminem ayudó en la elaboración del guión) y muestra la cruda realidad de las barriadas de una gran ciudad americana en clave de drama urbano. Nos guste o no, este es el film de claro contenido hip hop más importante y exitoso de todos los tiempos. La película podrá tener sus fallos, pero es evidente que el rap tiene una importancia enorme en ella y es el proyecto comercial que mejor ha mostrado la escena “underground” estadounidense hasta la fecha. 8 millasEn el plano artístico, se puede echar en falta un guión algo más elaborado, que no sirva sólo para lucimiento de su flamante protagonista, o una mejor interpretación de los actores (la capacidad dramática de Eminem no va acorde con sus dotes líricas), pero el director Curtis Hanson (L.A Confidential) consigue construir un ambiente realista y muy propicio para la historia que relata; además, para cualquier amante del rap resulta cuando menos interesante observar las entretenidas batallas entre los mc’s que trufan gran parte del metraje y suponen el clímax del film (en el dvd, podemos ver las “rap battles” en versión extendida, con pequeñas joyas tanto por parte de Eminem como de sus oponentes). 8 millasAparte de todo esto, hay que resaltar una excelente banda sonora en la que aparecen canciones de Mobb Deep, Notorius B.I.G., Wu Tang Clan o Outkast, además de los temas que se idearon expresamente para el film, con canciones de D-12, Jay-Z, X-Zibit (que, por cierto, aparece en 8 Millas en una corta pero divertida escena) o el propio Eminem, que ganó el Oscar a mejor canción por “Lose Yourself”. 8 millas
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