5.6
Charlie Wolfe es un asesino profesional que descubre que no es el único que intenta acabar con su próxima víctima y rápidamente se verá envuelto en un triángulo de mutilación, chantaje y venganza. Mátame tres vecesCritica:Extraña película australiana que aprovecha unos buenos actores y un guión divertidamente enrevesado para ofrecernos un divertimento que sin ser Tarantino ni Guy Ritchie, es entretenida y tiene algunos momentos realmente notables. Esta comedia de acción no se centra en un solo personaje sino que diversifica entre varios para deconstruir una historia que, sin ser nada del otro mundo, resulta interesante. Es como un remake de "El cartero siempre llama dos veces" pasado por el tamiz de un Tarantino descafeinado y, no obstante, este cruce funciona perfectamente. No tiene demasiados escenarios (cuatro, a lo sumo) ni tampoco demasiados actores (media docena) pero todo está perfectamente engranado y tener a Simon Pegg siempre es garantía a pesar de interpretar un personaje alejado de lo que conocemos (un asesino a sueldo). El guión es interesante y descompone la misma historia en tres partes que se entremezclan lo que provoca al espectador un sobreesfuerzo que acaba resultando divertido. No es un gran banquete pero te quita el hambre y como un vermut en una soleada terraza un domingo a mediodía, igual de delicioso. Lo mas curioso de esta película es que funciona gracias a unos estupendos actores, unas magnificas localizaciones, una narrativa diferente y una música divertidisima. No funciona por lo que debería funcionar: la historia. Pero funciona. Y eso, hoy en dia, es mucho. Mátame tres vecesMuchos intentos totalmente loables por parte de esta película y la gran mayoría de ellos fallidos. De entrada, una comedia negra que juega a no tomarse en serio a sí misma ni a los personajes debe ser más graciosa. Y con más graciosa no me refiero a que mi no me saque la más leve sonrisa, válgame Dios, eso es algo subjetivo, todo lo comprendemos. Sino que el humor reside exclusivamente en las caras made in Simon Pegg y el la pinta de tonto del personaje de Sullivan Stapleton, de ahí no pasa. Divertida? En el tramo final remonta, pero nos queda una prueba más de que para hacer una película fragmentada y desordenada hay que tener una mano muy fina en el guión, y evidentemente no es el caso. A mitad de la cinta el sopor llama a golpe y porrazo, y ni siquiera el frescor del cambio de perspectiva consigue tender una mano y empujar hacia adelante. Definitivamente, un desarrollo lineal le habría venido de perlas, o al menos, taparía vergüenzas. Mátame tres vecesUna absoluta pena, porque de verdad que este cast se merecía un guión mejor (salvo el hermano bajito de los Hemsworth, a ese tío sacadlo de la industria antes de que sea tarde). Aun así, hay algún que otro momento como las escenas de Callan Mulvey que consiguen hacernos creer a ratos que estamos en un noir playero bienintencionado. Poco más. Un cierre barato, ñoño y pseudo-gamberro que al menos, eso sí, termina dándonos algo de festival de potingue rojo. Kill Me Three Times Mátame tres veces