Servidor | Idioma | Tamaño | Descargar |
---|---|---|---|
Utorrent | DVDRip | 3.40 GB | Descargar |
A mediados de los años 60, la joven de 17 años Cathleen, criada por una madre soltera no religiosa en una zona rural de Tennessee, decide ser una sierva de Dios, pero durante su noviciado comienza a cuestionar su fe católica mientras recibe la formación para convertirse en monja. Novitiate La noviciaCritica:Estamos ante una película que no será recomendada en casi ningún periódico, radio o televisión como lo son otras numerosas mediocridades de diversos géneros y en particular si tratan de algún modo contra la Iglesia Católica (la reiterada «mala de infinidad de películas»); pero mil veces mejor y con un gran mensaje de fondo: La noviciaPropone esta obra o puede entresacarse lo siguiente: si bien, de siempre es humanísimo y antropológico buscar y dedicar gran parte de la vida a hablar con Dios en silencio y unirse a otros seres humanos que también se sienten anhelantes de la misma imantación religiosa, incluso apartarse del ruido o ruidazo mundano (por más que esto les parezca descabellado y locura a muchos hoy en día), sigue y seguirán habiendo mujeres jóvenes que opten por abtenerse de la mundanidad, de la práctica del sexo y de la procreación, algo que merece el agradecimiento humano general pues al hacerlo éstas están brindando al resto de la Humanidad un espacio y un renunciamiento dignos de tenerse en cuenta en medio de la plaga que supone ya casi ocho mil millones de seres humanos desmadradados sobre el planeta. Lo cual no quita que algunas de estas creyentes emprendedoras de la fe, de la caridad y de la esperanza, militantes vitales de estos ángulos principales de la religión, voluntarias del existencialismo habitual de relacionarse con Dios Amor, Bondad y Misericordia, es decir personas atraídas a ser candiles que deciden ponerse en alto para alumbrar las tinieblas procreativas de la humana mundanidad, se planteen si su predisposición ha de conllevar necesariamente el someterse a un estilo de vida donde hay que abdicar de la mínima dignidad y hasta de la reserva individual del subconsciente o de la propia conciencia para que la que está o los que están al mando de su ordenamiento religioso se sientan a gusto con su propia degeneración mental, religiosa y profesional. La novicia
Un adolescente huérfano forma una amistad con un detective. Juntos investigan el asesinato de su madre y descubren la fuerza sobrenatural que demuestra ser una amenaza para su familia. StrayCritica:Por una parte, soy un tardío fan de la cinta original. En 1983 me pareció un pestiño (era un adolescente abducido por ‘La guerra de las galaxias’); en 1992, en mi opinión, el montaje del director mejoraba (y mucho) la propuesta; pero no fue hasta hace algunos pocos años, ya en formato blue-ray, en que me sedujo y cautivó por completo y sin reservas. Por otra parte, soy un entusiasta admirador del director Denis Villeneuve, de quien sólo he visto aciertos de todo género y planteamiento, un virguero de las imágenes y del montaje, un artista incontestable y evidente, lo mejor que me he encontrado en una sala de cine en lo que va de siglo. Es decir, que iba con ganas y sana curiosidad al cine, esperando encontrar un propuesta inédita y – sea cual fuera el camino elegido – llena de aciertos… pero nada más lejos de la realidad.Pero vayamos por partes, porque hay muchos aciertos pero también otros tantos deméritos dignos de mención. Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. StrayEs decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia. Stray
Thor lucha por restablecer el orden en el cosmos, pero una antigua raza liderada por el vengativo Malekith regresa con el propósito de volver a sumir el universo en la oscuridad. Se trata de un villano con el que ni siquiera Odín y Asgard se atreven a enfrentarse; por esa razón, Thor tendrá que emprender un viaje muy peligroso, durante el cual se reunirá con Jane Foster y la obligará a sacrificarlo todo para salvar el mundo. Thor: The Dark World ThorCritica:Thor: El mundo oscuro" es una continuación que supera con creces al modelo original de 2011, y eso son buenas noticias. Si le sumamos que hablamos de una película que puede sobrevivir al hype post-Vengadores, como ya lo hizo también la sólida "Ironman 3" de Shane Black, tenemos una pareja de caballos ganadores este año para Marvel. El porqué podemos hablar de un film bastante mejor que "Thor" (Kenneth Branagh, 2011) tiene mucho que ver con el propio tono de la historia, con la facilidad con la que es capaz de unir un humor socarrón (pero blanco) con momentos dramáticos, la acción con el gag, en un sentido en el que es imposible no ver la mano de Joss Whedon (que no participa en el guión oficialmente pero sí reescribió ciertas escenas), dando lugar a un cóctel con el que es imposible no pasárselo bien. Y a fin de cuentas es a eso a lo que vamos a ver una película de superhéroes, aunque algunas se permitan el lujo de llegar más lejos. Que lo consigan o no ya es diferente. Los triunfos de "El mundo oscuro" son sin embargo bastante evidentes y elevan al aspirante al trono asgardiano a la categoría que se merece. ThorEl responsable de que todo esto salga adelante es Alan Taylor, más conocido por su trabajo en series como "Juego de Tronos", donde fue responsable de algunos de los mejores episodios de la primera temporada. De un estilo ciertamente reconocible sobre todo en momentos íntimos, donde el plano encierra a los personajes y los obliga a interactuar entre sí, no puede decirse que Marvel le haya dejado lucirse en exceso aunque cuando lo hace, se nota. "El mundo oscuro" tiene algunas imágenes bellísimas, de las que no voy a hablar de forma abierta para no incurrir en spoilers, pero por generalizar diré que aquellas que más me gustan son las que no tienen nada que ver con las batallas. Y no porque éstas estén mal filmadas (el climax es fantástico, por ejemplo), sino porque me gusta el tratamiento que Taylor le da a todos estos bloques en los que la cámara se puede quedar quieta, y el montaje no trocea las imágenes. Kramer Morgenthau (director de fotografía) y un inspiradisimo Brian Tyler (compositor) ayudan a que todo lo anterior gane en fuerza, épica, y plasticidad. Thor
No volver a mostrar