Una tímida adolescente descubre que forma parte de la legendaria realeza de los míticos Kraken, los señores del mar, y que su destino en las profundidades del océano es mucho mayor de lo que jamás había soñado.....Krakens y sirenas: Conoce a los GillmanCritica: Entrar a una sala a ver "Ruby: aventuras de una kraken adolescente" es una experiencia similar a entrar en una fiesta adolescente: música pop a todo volumen, luces, colores y la necesidad de estar conectado a las redes sociales permanentemente. Si uno logra superar ese ruido de fondo, se encuentra con un simpático relato narrado con una preciosa animación.Sin duda, está especialmente diseñada para su público objetivo y no se olvida de incluir romance, bailes de instituto y amigos con más relevancia que la familia. En ese universo juvenil, separa tanto las dos vertientes de la protagonista que parece que haya dos tramas independientes. Por un lado, la vida en el colegio y, por otro, lo que acontece en el océano –una original revisión del mito de krakens y sirenas–.Esta trepidante historia lanza un bonito mensaje de aceptación y resalta la importancia de los amigos de verdad, a la vez que anima a no dejarse llevar por las apariencias. Es cierto que cuenta con ciertas inverosimilitudes (como que los humanos se crean que Ruby es azul y tiene branquias porque “es de Canadá”) y que podría haber sido más profunda, pero es fácil identificarse con su entrañable personaje que no está a gusto consigo mismo y busca su lugar en el mundo..... Krakens y sirenas: Conoce a los Gillman
Un grupo de pacíficos alienígenas se encuentran huyendo de sus enemigos, y deciden esconderse de ellos en la Tierra. Sin embargo, uno de estos humildes extraterrestres accidentalmente notifica a sus perseguidores cuál es su ubicación, y no le queda más remedio que huir junto con una chica adolescente. HomeCritica:Si una película infantil no interactúa con los niños es que algo no marcha. Acabo de salir de una sala de cine repleta de pequeñas personitas que no han expresado sus emociones a lo largo del metraje. Ni una risa, ni un sobrecogimiento; una falta de empatía por parte del público infantil que me ha resultado sobrecogedora. HomeEl guión es extremadamente fallido porque sobre una estructura simple se montan unos diálogos largos y tópicos para una audiencia que necesita una línea argumental mucho más clara. Por no hablar del irritante líder de los bloovs (los extraterrestres morados que llegan a la Tierra) que resulta no solo molesto sino ridículo en su intento por parecer gracioso. HomeY es una pena que eso sea lo que quede en un film que tiene también detalles destacables. El diseño de la niña protagonista (de la que ya he olvidado su nombre) es delicado y hermoso; el encuentro entre ella misma y el bloov protagonista (de cuyo nombre tampoco me acuerdo) está muy bien montado; hay un destacable plano secuencia cuando la cámara, o su ficción, sigue al gato de la niña hasta que llega a los brazos de su pequeña ama. Aunque también, todo hay que decirlo, ni siquiera este recurso es original pues ya Pixar lo realizó magistralmente en la magnífica Ratatouille. HomeDejo el apartado de la animación para el final, donde el resultado es absolutamente desigual. Me explico. Los escenarios interiores, la textura del pelo resultan notables pero estos logros quedan oscurecidos por la rígida animación de los movimientos humanos que no expresan fluidez alguna. Por favor, Dreamworks, ya va siendo hora de que inviertas en programas informáticos si quieres recuperar el terreno perdido en la animación digital porque ya han pasado muchos años desde "Shrek" cuyos seres humanos mostraban idénticos movimientos robotizados o, si no, recurre al diseño manual que tanta belleza y gracia muestra desde "Blancanieves" hasta "El viento se levanta".
No volver a mostrar