En 1306, el rey escocés Robert the Bruce se convierte en un forajido derrotado cuando su país es invadido. Pero antes de liberar su tierra sagrada, deberá conseguir recuperar su voluntad de lucha y sobrevivir a la persecución de quienes quieren hacerse con su cabeza y con el oro inglés.
El destino de Simone Veil, su infancia, sus luchas políticas, sus tragedias. El retrato épico e íntimo de una mujer con un recorrido vital fuera de lo común que revolucionó su época defendiendo un mensaje humanista que pervive hasta hoy.
Sophie es una joven de 18 años que trabaja sin descanso en la tienda de sombreros de la familia. En uno de sus frecuentes paseos conoce al enigmático mago Howl, lo que despierta la ira de la Bruja Calamidad, que odia a Howl con todas sus fuerzas. Cuando Sophie vuelve a la tienda, la Bruja se hace pasar por una clienta para acercarse a ella y lanzarle un hechizo… ¡que convierte a Sophie en una anciana de 90 años! Sophie, que no puede revelar su auténtica identidad, recurre a Howl para buscar una solución a su problema. Para ello se embarca en un viaje fantástico en el castillo ambulante del mago, habitado por personajes de lo más curiosos. Sophie necesita ayuda pero quizás sea Howl el que realmente está en apuros.
Un grupo de estudiantes de la escuela de magia Alfea aprende a dominar sus poderes mientras lidia con rivalidades, romances y sucesos sobrenaturales.
En un futuro no muy lejano, el boxeo es robótico: en los combates ya no se enfrentan seres humanos, sino robots humanoides, sofisticadas máquinas diseñadas para luchar. Charlie Kenton, un antiguo púgil que casi llegó a alcanzar la gloria, está pasando una mala racha como promotor de combates. Un día, encuentra un viejo robot desechado y, al comprobar que es un gran boxeador, decide entrenarlo. Real Steel Gigantes de aceroCritica:Hay veces que uno acude al cine con unas expectativas prácticamente nulas sobre la película que va a visionar. Ya sea debido a la poca publicidad que se le ha dado, o por culpa de las críticas negativas, o simplemente porque no te esperas que saquen nada bueno tras leer la sinopsis. Como he dicho anteriormente, hay veces que uno acude al cine y ¡tachán!... se lleva una agradable sorpresa. Pues sí, la verdad es que este filme resulta mucho mejor de lo que uno se espera a priori. Y déjenme que añada, además de la afable sorpresa que supone, que incluso me parece una buena película. GigantesNunca pensé que presenciaría una versión robótica de “Rocky” en un cine, pero mira tú por dónde que bien podríamos definir al filme que nos atañe de esa manera (desde luego a los que hayan visto la saga pugilística del incombustible Stallone les invadirá una placentera sensación de déjà vu). Para ser exactos te diré que “Acero puro” es el resultado de meter en una coctelera a “Yo, el halcón”, “Rocky” y “Transformers”. Puede que no sea una película del todo original, pero al menos, en mi opinión, es una de las cintas más frescas y agradables que he visto en mucho tiempo.No se preocupen si creen que la historia va a gravitar sobre un lacrimógeno drama de padre e hijo a la antigua usanza, ya que os aseguro que en ningún momento cae en vomitivos lloriqueos ni en abusar del sentimentalismo barato de garrafón. De acuerdo que tiene su toque sentimentaloide y que tiene algún que otro tópico (como el del padre desastre y el niño sabihondo), pero permítanme que les diga que la historia no está nada mal y, además, incluso resulta entretenida de principio a fin. GigantesSobre el apartado técnico y las interpretaciones seré breve. Todo el aspecto técnico del producto es muy bueno: los robots son alucinantes, no me los imagino mejor hechos, y los combates son apasionantes (el duelo final incluso te hace levantarte del asiento para animar… ¡Jajaja!). En fin, un resultado auténticamente de chapeau. Y el elenco de actores cumple con creces en sus roles interpretativos (ninguno hace el papelón de su vida, pero tampoco desentona). Por último, y a pesar de que su papel es secundario, quiero hacer una mención especial a Evangeline Lilly, la cual se ve radiante en los pocos minutos que le dan y, encima, hace que la parte romanticona de la historia no moleste para nada. Gigantes
No volver a mostrar