Un agente de Hollywood casado recibe una misteriosa carta para un encuentro sexual anónimo y se ve envuelto en un mundo siniestro de mentiras, infidelidad y datos digitales.
Sigue a un adolescente desilusionado que fue reclutado en una escuela secundaria para asesinos. Mantener su código moral mientras sobrevive a un plan de estudios despiadado, camarillas sociales viciosas y sus propias incertidumbres adolescentes puede resultar fatal.
Un enfrentamiento de décadas en proceso cierra el círculo del legado de la familia Donovan. A medida que los eventos que hicieron de Ray quien es hoy finalmente salen a la luz, los Donovan se ven atraídos de regreso a Boston para enfrentar el pasado. Cada uno de ellos lucha por superar su educación violenta, pero el destino es difícil de matar, y solo su feroz amor mutuo los mantiene en la lucha....Ray Donovan, la películaCritica: llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.....Ray Donovan, la película
La historia de Daniel Jones, investigador principal del amplio estudio del Senado de los EE. UU. Sobre el Programa de detención e interrogatorio de la CIA, que resultó ser brutal, inmoral e ineficaz. Con la verdad en juego, Jones luchó incansablemente para hacer público lo que muchos en el poder intentaron mantener oculto. The Report CriticaEl norteamericano Scott Z. Burns se ha hecho un hueco en la industria del cine merced a sus guiones en cintas como ‘El ultimatum de Burn’, ‘El soplón’, ‘Contagio’ o ‘Efectos secundarios’. Su segundo largometraje como director, ‘The report’, que se estrena en Amazon Prime, guarda el aroma propio de los grandes eventos. Esos acontecimientos que por su trascendencia e impacto ante eso que se ha dado en llamar la opinión pública, bien pueden marcar una época.Adam Driver se mete en la piel de Daniel Jones, un empleado del Senado de los Estados Unidos, que a lo largo de varios años investigó el programa de “Interrogación y Detención” de la CIA, sometiéndolo a un exhaustivo escrutinio, desvelando brutales e inmorales procedimientos. ‘The report’ se estructura como un vibrante thriller político. En el camino se entrecruzan elementos de un enorme interés, de múltiples derivaciones.Desfilan en una narración que compatibiliza lo instructivo con la tensión dramática. Quede constancia que no es una película fácil. Requiere del espectador un cierto conocimiento de cómo funcionan las instituciones americanas. A partir de ahí, se perfilan grandes contradicciones en su democracia. Al tiempo que suceden atrocidades brutales bajo la genérica denominación de ”técnicas de interrogatorio mejoradas”, un trampantojo que oculta la más siniestra de las torturas, se observa una escrupulosa separación de poderes. Con instituciones que ponen a prueba su solidez, aún dejando sus daños colaterales en el camino. ”Ningún país haría una investigación como esta”, dice un alto cargo del gobierno. Quizá lleve razón.Burns hace una gran dirección de actores. Los secundarios radian lo importante del momento, y Driver, conocido por ser el nuevo Darth Vader de la interminable saga de Star Wars, aporta a su actuación un tono de compostura presidencial que le sienta muy bien.‘The report’ pretende ser objetivo. Atenerse a los hechos. Huye de ese maniqueísmo con toques conspiranoicos que en tantas ocasiones nos ha saturado. Y al que Oliver Stone ha recurrido con ahínco a lo largo de su filmografía. Presenta un ambiente complicado. Dónde la seguridad se convierte (probablemente con razón) en una obsesión que muestra su cara más compulsiva. Para alejar la visión de una Norteamérica en blanco y negro, deja hacia el final del metraje un mensaje rimbombante, que me huele a naftalina. Cosas del cine. Y de América. The Report
Stephanie es una joven madre videobloguera de una ciudad pequeña cuya mejor amiga, la sofisticada Emily, desaparece un día repentinamente. A Stephanie le ayudará en su búsqueda el marido de Emily, Sean. Un pequeño favorCriticaAntes de nada quiero decir que no voy a caer en el “spoiler” fuera de su espacio o que rehúso a adelantar cualquier posible sorpresa, como han hecho otros usuarios o incluso parte de la “crítica especializada”. Menos mal que cuando voy al cine me informo poco, porque así me ahorro disgustos. Tiene su parte buena y su parte mala: si el film es horrendo, por desgracia, no recibo ninguna advertencia, y si hay algo que no deba saber nadie me la destripa, esa es la ventaja.Y ahora ciñéndonos al tema en concreto, Paul Feig, tras su sonado batacazo con el “remake” de “Cazafantasmas”, vuelve a la línea trazada en “Espías”, es decir, un film de evasión, con tintes “neo- drag”, sazonado con ciertas dosis de “petardez” y evocaciones a un estilo cinematográfico que ha caído en desuso, aunque he de decir, que en ese sentido, “Espías” me pareció algo más lograda. Es un tipo de cine que a los más exigentes les podrá resultar una simple parida, pero creo que, además de que deban existir toda clase de pasatiempos, hay en ella ciertos factores que la libran de ser claramente una vulgaridad o una mierda, hablando mal y pronto. Es más, incluso a veces se recurre a un intento de recreación de ambiente a lo que muchos mal llamaban “comedia sofisticada” de los años sesenta y parte de los setenta, lo cual a mí me gusta.De entrada, y ante tanta producción reiterativa, está exenta de testosterona gratuita, violencia de relleno o diálogos trillados. Quizás por esta razón la mayoría del público asistente a la sesión eran mujeres, aunque no se trate en absoluto de un film que solamente le podría interesar a un público femenino. El arranque de “Un pequeño favor” promete mucho, aunque luego ciertos elementos durante el camino no se aprovechen.De entrada ¡incluyen títulos de crédito! Eso es algo que ya pocos films tienen y que muchos echamos en falta, unos créditos bonitos tanto de color como de diseño. La mayoría de las canciones que se van utilizando parecen un precioso homenaje a la “canción francesa”, con temas cantados por Hardy, la Bardot, Gainsbourg, Zaz o Dutronc, entre otros, y aunque aparezcan brevemente temas de otras épocas y “latitudes” el clima francés reina en la película.El guión, que no me esperaba que se basara en ninguna novela, en este caso de Darcey Bell, es una acumulación de referencias que pensé que partían de sus creadores, como Paul Feig o Jessica Sharzer, a modo de parodia. Por eso su verdadero fuerte no es su argumento, si no sus diálogos, y sobre todo su acertado “casting” en el que sus dos actrices principales hacen unas composiciones que podrían recibir la sorpresa de aparecer nominadas, por ejemplo, en los Globos de oro, como Anna Kendrick, que parece haber tomado como referencia a la Sally Hawkins de “Happy: Un cuento sobre la felicidad” además de parecerse físicamente a esta gran actriz, y Blake Lively, cuyas referencias las dejaremos para el “spoiler” y hace también un notable trabajo, posiblemente uno de los mejores de su carrera.Sus giros, sobre todo en la segunda mitad, quizás se exceden tanto en intenciones de sorprender, como de deslumbrar en exceso. Y eso juega en parte en su contra, como también cuando se toma demasiado en serio y se olvidan de que la clave de comedia no se debe perder, porque cae en la inverosimilitud. Un pequeño favorFeig hace una buena labor en su dirección, así como el resto del equipo técnico, logrando un correcto “divertimento” para los que busquen específicamente esta clase de género. Y sin más, vamos al spoiler. Un pequeño favor
No volver a mostrar