Después de ser asesinado por un grupo de criminales, un hombre renace con superpoderes similares a los de los animales y tiene como misión corregir los errores de su ciudad.....Shadow MasterCritica: ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.... Shadow Master
Sigue a un grupo de personajes a medida que sus caminos se cruzan durante el transcurso de una tarde en un restaurante de Los Angeles....Punto de fugaCritica: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.... Punto de fuga
Ivy triunfa en su profesión, pero un día durante una reunión cae gravemente enferma, padece un tumor cerebral. Un apuesto médico le ayuda a superar su enfermedad, aunque con resultados imprevisibles. Prescripción por el peligroCritica:Por una parte, soy un tardío fan de la cinta original. En 1983 me pareció un pestiño (era un adolescente abducido por ‘La guerra de las galaxias’); en 1992, en mi opinión, el montaje del director mejoraba (y mucho) la propuesta; pero no fue hasta hace algunos pocos años, ya en formato blue-ray, en que me sedujo y cautivó por completo y sin reservas. Por otra parte, soy un entusiasta admirador del director Denis Villeneuve, de quien sólo he visto aciertos de todo género y planteamiento, un virguero de las imágenes y del montaje, un artista incontestable y evidente, lo mejor que me he encontrado en una sala de cine en lo que va de siglo. Es decir, que iba con ganas y sana curiosidad al cine, esperando encontrar un propuesta inédita y – sea cual fuera el camino elegido – llena de aciertos… pero nada más lejos de la realidad.Pero vayamos por partes, porque hay muchos aciertos pero también otros tantos deméritos dignos de mención. Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, Prescripciónesa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia. Prescripción
'Spin-off' de la saga Paranormal Activity. Después de ser "señalado", Jesse (Andrew Jacobs, Angel of Death) empieza a ser perseguido por fuerzas misteriosas que harán de su vida un infierno. Su familia hará todo lo posible por salvarle, aunque eso no les va a resultar nada sencillo. Así, comenzará una dura lucha entre el bien y el mal, en la que no queda claro quién acabará venciendo a quien. Paranormal Activity: The Marked Ones paranormalCritica:Entrando ya en la película, lo primero es decir que está grabada con el recurso de hacer como si se tratara de una cámara que los protagonistas llevan todo el tiempo consigo, filmando en primera persona. Algo que ya hemos visto en La bruja de Blair o en la española REC, y que nunca me ha convencido mucho, quizá por cargarse la magia que da la fotografía al cine o simplemente por cierta sensación de mareo al moverse la cámara rápido. En cualquier caso, esta cámara sólo sirve para cambiar la sensación de angustia y suspense que caracteriza al cine de terror bueno, por el susto rápido al girar la cámara y ver que donde no había nada ahora hay una figura humana,situación que se repite constantemente a lo largo de la película, causando algún que otro grito del público femenino y bastantes bostezos en general. Y eso es todo cuanto tiene de terror, porque el resto del film parece una comedia adolescente mala. paranormalEl argumento no tiene sentido, ni explica gran cosa. Unas especie de brujas hacen rituales a mujeres durante el embarazo, con oscuras intenciones. Los protas descubren que su vecina es una de ellas, y al comenzar a investigarlo empiezan a sentir la presencia de un espíritu. A partir de ahí, una hora y media de escenas que rozan lo absurdo, con situaciones que en ningún momento dan miedo, sustos baratos sin ningún sentido en la trama, y un final que parece una verdadera broma, para terminar la película sin saber ni qué ha pasado, y con la sensación de haber sido insultado como espectador. paranormalNo digo nada de las interpretaciones, guión o banda sonora (inexistente, cuando debería ser uno de los principales elementos del terror), porque sería hacer ya demasiada sangre de esta broma de mal gusto. No hay ni un solo aspecto de la película minimamente bien trabajado. Da que pensar en qué momento se permitió el acceso a la gran pantalla a la ausencia total de talento cinematográfico. paranormal
Después de matar a un miembro del sindicato de la droga mientras protege a una persona en libertad condicional, Connor Connolly tiene un día para pagar dos millones de dólares en reparaciones, dinero que no tiene, a Tyrone Pettis. Se ve obligado a pedirle a su antiguo equipo de operaciones militares, liderado por Brice Mason, que se una y de alguna manera obtenga dos millones de dólares antes de que Connor pierda a todos los que ama...Un día para morirCritica: Mediaset montó el chiringuito solidario "12 meses, 12 causas" en televisión como la campaña de sensibilización para ofrecerle cobertura informativa a causas sociales. A Rakuten y Amazon les está surgiendo algo por el estilo con las 12 últimas peĺículas pendientes de estreno tras saberse que Bruce Willis deja la interpretación dosificándolas durante el transcurso de 2022. Y aunque no lo parezca a tenor del éxito de crítica de su último estreno en salas (!!) a Frank Grillo todavía le queda cuerda en el circuito del streaming acompañando -en fin, ya sabéis, siendo el auténtico gancho- tanto a Bruce como a Kevin Dillon, al que desde hace años no le surgen películas mejores por las que pasearse a semejanza de Johnny Messner que... bueno, a éste en realidad no recuerdo haberle visto anteriormente en empresas mucho más ambiciosas que ésta. Wes Miller viene de realizar vehículos recientes de lucimiento para el mismo Frank Grillo, John Cusack o Eric Roberts, lo que da un "sello garantizado" de calidad. Por cierto, ¿es mi imaginación o con barba es más difícil distinguir a Kevin Dillon del rubio gordo con melena de Cruz y Raya? En fin, y yéndonos al argumento: que le secuestran la familia, le extorsionan y acude a su antiguo equipo especialista en meterse en pifostios de explosiones y tiroteos. Llamándose 'Un día para morir' y un fulano que se llama 'Leon' -sin apellidos- en el reparto no esperarías un psicodrama bergmaniano digrediendo sobre el miedo a morir y la insignificancia de la vida, ¿no? Otra más en la cuenta atrás de Bruce, y aquí por lo menos le dejan jugar un ratito con una ametralladora y pistolas en un resultón intento de homenajear a 'Heat' (1996, Michael Mann) que reparten a pachas é, su doble de riesgo y otro doble de cuerpo. La quinta peli de John McClane ya no volverá a ser señalada como la peor película de Willis en la que el juego de palabras 'day' y 'die' se meta con calzador en su título..... Un día para morir
Dreamland Ambientada en la década de los años 30, en plena devastación producida por el fenómeno medioambiental denominado «Dust Bowl» (literalmente, «Cuenco de Polvo»), la historia sigue los pasos de un joven (Travis Fimmel) de 17 años que se propone capturar a una ladrona de bancos (Margot Robbie) que se ha dado a la fuga y cuya cabeza tiene una suculenta recompensa. Aunque vence al FBI y la alcanza antes que las autoridades del país, pronto descubre que la criminal es incluso más peligrosa de lo que todos habían imaginado…
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