Passepartout, un mono ingenuo pero vivaz, siempre ha soñado con emprender una aventura. La oportunidad viene en forma de Phileas Frog, un exploradora la vez que estafador, y una apuesta multimillonaria: establecer un nuevo récord para una gira por el mundo. Desde desiertos ardientes hasta selvas misteriosas, desde princesas intrépidas hasta langostas adoradoras de volcanes, Passepartout descubrirá lo increíble, maravilloso y loco que es el mundo.
Un adolescente de Philadelphia siente una gran pasión por los pájaros. Esta afición desata en él un deseo irresistible de aprender a volar, un interés que lo lleva incluso a apartarse del mundo y a hacer diversos experimentos, algunos de los cuales ponen en peligro su vida. El mejor amigo de "Birdy" es Al, el prototipo de joven sano y normal. Los dos intervienen en la guerra del Vietnam, de la que "Birdy" vuelve convencido de que es un pájaro.
Un perro faldero demasiado grande, con una veta irascible y una inclinación por las travesuras, se atempera con un profundo sentido de amor y responsabilidad por su familia...MarmadukeCriticA: una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia..... Marmaduke
No volver a mostrar